Sobre un espacio de 250 metros cuadrados integramos mobiliario, decoración, iluminación, audiovisuales… y conformamos una exposición abierta basada en la horizontalidad del servicio y la cercanía a un cliente exigente, tanto final como profesional.
Para empatizar con este último se utiliza un lenguaje técnico y sencillo para componer un mensaje propio de los espacios en construcción con los que trabaja este profesional. Materiales como el hormigón, presente en el forjado visto y los pilares desnudos, instalaciones vistas o el mortero que compone la icónica pared que soporta el logotipo de Sutega, van tejiendo una atmósfera confortable y familiar muy relacionada con actividad principal de la empresa.
El INteriorismo EStratégico de Sutega, más cerca del servicio que del producto
Una de las decisiones estratégicas que marcan este diseño es el hecho de considerar a Sutega como una empresa más cercana al servicio que a la venta de productos. De ahí que en todo momento el protagonismo recaiga en el acercamiento del equipo humano al cliente, prescindiendo de todo tipo de planteamiento jerárquico y utilizando el propio equipamiento de trabajo como exposición, rebajando así el estrés de la venta a través de la experiencia y la demostración.
Se disponen corners abiertos y versátiles sobre fondos neutros en los que, tal como ocurre en un museo, es «la obra» y no el espacio contenedor la que atrae todas las miradas. La sutileza de las divisiones permite una cómoda renovación de la exposición sin que el conjunto pierda la homogeneidad general que conduce la experiencia y trasmite la esencia de la marca.
Dos salas de reuniones, versátiles y dinámicas, funcionan a su vez como espacios expositivos y, al mismo tiempo, ofrecen soporte para un branding de marca a través de colores corporativos sobre un ladrillo caravista que, nuevamente, desarrolla el lenguaje técnico presente en todo el diseño.
En definitiva, componemos un espacio rítmico y evocador capaz de resultar funcional y estratégico de forma simultánea. Un espacio que acerca el producto y el servicio de Sutega a su cliente y transmite con sutileza su mensaje corporativo a través de la representación fidedigna de su verdadera esencia.
¡Larga vida a Sutega!
