Sin duda este post en el que hablábamos sobre mentiras en arquitectura ha sido el más polémico de todos cuantos hemos publicado hasta el momento en este blog. Bien, pues ahora voy a hablarte de otra gran mentira, los renders 3D en arquitectura, también conocidos como infografías 3D, infoarquitectura, o imágenes de realidad virtual.
Se entiende por renderización el proceso de generar informáticamente una imagen más o menos realista a partir de un modelo o proyecto. Estas imágenes suelen utilizarse en arquitectura para presentar al cliente un anticipo de lo que será su proyecto una vez ejecutado. Evidentemente existen otras muchas aplicaciones, pero esta es la que nos ocupa.
Bajo estas líneas puedes observar un montaje realizado con imágenes del proyecto Mundaka World, tienda de moda urbana en Santiago de Compostela. A la izquierda el render 3D que se presentó al cliente antes de dar el visto bueno al diseño. A la derecha la tienda real una vez presentado el proyecto final y ejecutada la obra.
A pesar de que los puntos de toma son diferentes, como puedes observar, si el render 3D está bien hecho, cuesta diferenciarlo de la realidad.
¿Dónde está la mentira pues?
La trampa está en que muchas veces, cada vez más, se presentan renders 3D como si fueran proyectos realmente ejecutados.
El render 3D o infografía 3D es un arma tremendamente visual que puede ayudarnos a hacerle entender al cliente qué es lo que tenemos en la cabeza. En ocasiones es muy complicado para una persona con poca visión espacial entender y conceptualizar un proyecto tan sólo a partir de unos planos. Y en estas ocasiones el render 3D es la solución perfecta.
Pero cuando se utiliza una infografía 3D para engañar deslizando interesadamente un currículo falso, mostrando una experiencia que en realidad no se fundamenta más que en el dominio de un software informático, y en ocasiones ni eso, estamos despreciando la inteligencia del cliente. Estamos insultando a la inteligencia humana y desprestigiando a la arquitectura y el interiorismo como profesiones claves en la historia.
Últimamente nos cansamos de ver páginas webs de estudios de arquitectura e interiorismo con su apartado «proyectos» lleno de renders 3D. Y no tendría nada de malo siempre que se «avise» al visitante. Pero lo triste es cuando nos la intentan «colar».
Cómo detectar los renders 3D en arquitectura
Existen algunos truquillos para detectar un render. Además de a simple vista que en ocasiones es suficiente, veamos algunos.
- Busca las personas. En un render no suele haber seres vivos porque son los más complicados de renderizar. Y si los hay obsérvalos, suelen «cantar» bastante.
- Luces y sombras. Es difícil renderizar fielmente la incidencia de la luz en los objetos y las sombras que estos producen. Generalmente existen inconsitencias que se pueden detectar.
- Exteriores. Las texturas más difíciles de renderizar son las de la propia naturaleza y la incidencia de la luz en ella. Observa los exteriores.
- Exceso de brillo. Es un defecto muy común. Las infografías 3D suelen ser muy brillantes. Suelos hiperlímpios, cristales inmaculados, mesados…
- Perfección. Los bloques que se usan como mobiliario suelen ser perfectos, ni una raya, ni una abolladura, esquinas perfectas, luz uniforme… La realidad sabemos que no es así.
- Efecto flotación. Observa los objetos sobre el suelo. ¿Te da la sensación de que flotan? Si es que si, es un render 3D, y probablemente malo.
Imágenes: El render 3D de la izquierda fue realizado para Ivan Cotado Diseño de Interiores por BCN Render. Fotografía derecha realizada para Ivan Cotado Diseño de Interiores por Héctor Santos-Díez de la agencia BISimages.
Hola, Iván:
es cierto lo que dices, recientemente he tenido la impresión de estar viendo renders que eran presentados como proyectos, no recuerdo la web. Como tu, creo que en este caso, debería constatarse. Saludos!
Gracias por el comentario Isabel.
El cliente no es tonto, si intentamos «colársela» de esta manera, más bien pronto que tarde aflorarán las carencias. Debemos pensar más en el largo plazo que en el beneficio inmediato.
Un saludo.
Hola Iván.
Estoy de acuerdo con lo que dices. Aunque como infografista pienso que un buen proyecto siempre tiene que ir acompañado de unas buenas infografías. Buen blog. Saludos
Cierto Victor. Hay opiniones para todos los gustos al respecto. Nosotros solemos presentarlas. Pero está clarísimo que de presentarlas al cliente a colgarlas en una web hay un largo trecho. En todo caso, si se cuelgan habrá de hacerse en calidad de infografías, no de proyecto.
Un saludo y gracias por comentar.
A mi modo de ver tanto las infografías, los dibujos, ilustraciones, planos, presupuestos, etc. forman parte de un proyecto; o sea son el proyecto en si. Otra cosa son las fotos de la obra terminada. Que una cosa tenga más valor que la otra es algo relativo que depende de lo que se pretenda evaluar. Por un lado la capacidad de estudiar y presentar conceptos y soluciones a problemas concretos, por otro la experiencia y habilidad de llevar a cabo estos proyectos en una obra. Quien pretenda pasar gato por liebre es alguien deshonesto que no ha comprendido cuales son sus puntos fuertes. Pero al menos para mi las dos cosas tiene gran valor en si mismas.
Gracias por tu comentario Abel.
Por supuesto que ambas cosas tienen gran valor cuando se hacen bien y de forma honesta.
Pero cuando intentas hacer pasar una infografía o render por un proyecto que nunca has hecho estás engañando al cliente.
Como bien dices, se trata de honestidad, simple y llanamente.
Cada uno es libre de hacer y presentar lo que crea conveniente Victor. Lo único discutible es intentar hacer pasar «gato por liebre».
Un saludo y gracias por dejar tu comentario.
Entiendo en parte lo que dices, pero estoy en desacuerdo en otras partes del post. Porque creo que de alguna manera estas mezclando conceptos que no tienen porque ir unidos.
Soy interiorista, y utilizo frecuentemente el renderizado fotorealistico, tengo proyectos realizados, de los cuales el cliente me deja publicar las fotos del resultado real, ocasiones en que el cliente no quiere mostrar las fotos de su casa, por intimidad y se debe respetar, pero en cambio si te deja publicar el 3d y renders, existen como tu bien has dicho, proyectos en los que has dedicado tiempo y el cliente no acepta y también hay momentos donde baja el volumen de trabajo y realizo proyectos sin pedido, a mi libre disposición en los que diseño realmente «lo que me viene en gana», y como si de un encargo se tratase realizo un «proyecto» completo, hago renders de ese proyecto y los pongo, porque al fin y al cabo son ejemplos de mi trabajo y mi manera de diseñar, y eso es lo que realmente tiene que importar, si yo pongo en mi web o en mi portfolio un render de un diseño realizado por mi, muestro mi capacidad de diseño y trabajo y no creo que engañe a nadie por poner que se ha realizado o no, quizá la única diferencia es que en ese momento había o no dinero para realizarlo, una cosa no quita la otra, pero no entiendo esa persecución o llamamiento al engaño, si alguien dice que es una foto real y es un render se engaña él mismo, pero no veo la necesidad de aclarar en cada proyecto si al final el cliente ha aceptado y se ha realizado o es simplemente una infografía de algo que no se ha hecho.
Creo que criticar de ese modo el trabajo de otros sin conocer quizás el trasfondo o la situación de los mismos es muy poco profesional. Yo optaría por defender tu manera de trabajar sin compararla con la de nadie. No hay que pisar para adelantar, si no ir mas deprisa.
No te quito la razón en parte de lo que dices en el post. Pero repito que la totalidad del artículo me parece algo presuntuosa y un poco desmesurada.
Gracias.
OXID, gracias por dejar tu respetuoso comentario, pero creo que o no nos hemos explicado bien, o tú no lo has entendido.
No considero que haya nada de malo (como bien dices) en realizar renders, incluso en publicarlos en tu web, nosotros mismos tenemos alguno colgado, y así lo digo en el artículo: «En nuestra web, o en el blog, únicamente hay dos proyectos con renders 3D»
Lo único que me parece condenable es que no se avise al visitante, y así lo dice también el artículo: «Y no tendría nada de malo siempre que se “avise” al visitante. Pero lo triste es cuando nos la intentan “colar”.»
No se trata de avisar al cliente de si un proyecto se ha realizado o no. Se trata de decir si estás mostrando un Render o una Fotografía real. Si trata de decirle toda la verdad a la gente, se trata de honestidad, pues estarás de acuerdo conmigo en que no es lo mismo dibujar y renderizar que ejecutar.
Espero que en esta ocasión haya quedado más claro. Pero si quisiera puntualizar algo que me parece más importante todavía: nuestro estilo no es pisar a nadie, y eso creo que queda patente en la honestidad de este artículo.
Una cosa más, somos libres de criticar todo aquello que consideremos un fraude y así lo seguiremos haciendo, huyendo en todo momento del corporativismo trasnochado que nos perjudica como profesionales y sobre todo van en contra del cliente.
Un saludo.
Pero cuál es el problema? Acaso realizar un buen render, con un buen diseño, no lleva tiempo y trabajo? En mi estudio ponemos «Proyectos» y «Obras». No aclaramos si es un render o no, sin ánimos de engañar a nadie, y jamás hemos tenido ningún problema. Yo personalmente jamás dudo sobre si una imagen es un render o una fotografía. Por hacer los renders, te diría cobramos más caro que por hacer la obra, es trabajo, vamos. Claro que no es lo mismo que una obra ejecutada, pero eso es problema de cada uno. El cliente tiene muchas maneras de darse cuenta de si el arquitecto o el interiorista es idóneo o no para el encargo.
El cliente no tiene que darse cuenta, eres tú quien debe explicarle la diferencia entre una cosa y otra, y no tratar ganar mediante el silencio.
El cliente no tiene por qué saber diferenciar si yo soy un experto en renders o un experto en ejecución/proyectos. Y jugar con la confusión en ese sentido, a mi juicio, no es muy digno. Pero allá cada uno.
Repito, no tiene nada malo hacer renders. Jugar con los conocimientos técnicos del cliente sí. Aunque como bien dices, al final, el cliente sí sabrá si dominas el campo de la informática o el del interiorismo, la pena es que para muchos es tarde.
Es una gran herramienta, eso si, si alguien pretende hacer pasar un render por un proyecto real, está muy mal, para mi son una erramienta que uso casi a diario
Hola, cito textualmente «Pero cuando se utiliza una infografía 3D para engañar deslizando interesadamente un currículo falso, mostrando una experiencia que en realidad no se fundamenta más que en el dominio de un software informático, y en ocasiones ni eso, estamos despreciando la inteligencia del cliente»
Con esta frase desprecias el trabajo de un renderista. Siempre he tratado con clientes que saben lo que piden y un render es parte del proceso. Otra cosa es que un interiorista ponga en su CV un render como trabajo finalizado, pero si ese interiorista es renderista a su vez, como es mi caso, no sé de qué hablamos entonces.
Quizás en lugar de lanzar un crítica, lo mejor sería conocer el proceso desde el principio hasta el final y saber que de aquí a 10 años todo funcionará con renders.
Un saludo.
Estimada «Renderista/Arquitecto/Interior» amparada tras un seudónimo; cito textualmente «…cuando se utiliza una infografía 3D para engañar…». La clave está en «engañar».
Quizá debiera Ud. leer más detenidamente el artículo, se daría cuenta de que nosotros también utilizamos renders, pero para ayudar al cliente a entender un proyecto, no para llevarlo a engaño. Como bien argumenta Ud. a día de hoy es una herramienta imprescindible, no tiene nada de malo hacer renders, de hecho intentamos colaborar con los mejores renderistas.
Saludos y gracias por pasarse.
Todos los que se quejan son chavos que recién empiezan o gente que no tiene tantos proyectos ejecutados realmente. Los arquitectos buenos siempren están llenos de trabajo, tienen muchas fotos de su obra real y ni tiempo tienen para estar colgando renders.